Con independencia de la actitud indignante y arrogante mostrada por Donald Trump y su vicepresidente J.D. Vance, en su Reunin pblica con Zelenski en el Despacho Oval, el pasado 27 de febrero, poniendo en cuestin el empeo de varios lderes europeos de alcanzar un alto el fuego justo, lo cierto es que la poltica de hechos consumados que Trump trata de imponer a Zelenski se parece mucho a una claudicacin de Washington ante Mosc.
Trump parece dispuesto a conceder todo lo que Putin est demandando: su salida del aislamiento internacional; la no entrada de Ucrania en la OTAN; que se quede Rusia con todos los territorios ucranianos ocupados; no habr soldados estadounidenses desplegados en Ucrania; que Ucrania sea un estado neutral; o que, al mismo tiempo Estados Unidos levanta las sanciones a Rusia. Ya hemos dicho en estas pginas que los principales objetivos de Trump consisten en conseguir unas estrechas relaciones de cooperacin y colaboracin con Rusia para hacer frente a su verdadero adversario geopoltico que es China.
Es de destacar la prisa que tiene Estados Unidos frente a la parsimonia de Rusia. Putin est encantado de negociar con el lder estadounidense que, sin darle nada a cambio, le est dando un tratamiento como gran potencia en el campo internacional, con su aceptacin a negociar sobre la guerra de Ucrania sin Ucrania, produciendo una divisin entre los aliados del pas invadido poniendo fin al orden mundial liderado por Estados Unidos desde final de la II Guerra Mundial basado en un sistema internacional sustentado en unas reglas y normas universales, de cooperacin multilateral y estabilidad global.
La reaccin europea e413d
En la cumbre extraordinaria de Bruselas del pasado da 6, la Unin Europea aprob un proyecto para acelerar el gasto en defensa y mantener el apoyo a Ucrania, despus de que la istracin Trump advirtiera de que Europa tendra que defenderse por s misma en el futuro. Se trata de movilizar hasta 800.000 millones de euros para financiar un aumento masivo del gasto militar. Constituye un plan de rearme, pero a medio plazo.
Incluye un nuevo instrumento para proporcionar 150.000 millones de euros en prstamos a los Estados para financiar inversiones conjuntas en capacidades de Defensa paneuropeas, incluyendo defensa area y de misiles, sistemas de artillera, misiles y municiones, drones y sistemas anti-drones. A pesar de la muestra de unidad sobre el gasto de defensa, los 27 no lograron ponerse de acuerdo sobre una declaracin conjunta sobre Ucrania, debido a la oposicin del primer ministro hngaro, Viktor Orbn.
Occidente sustentado en unos valores democrticos y de libre mercado teniendo como marco de referencia en todo momento los derechos humanos, la libertad y el bienestar se ha roto. Europa queda ahora como nico representante de lo que llamamos Occidente tras el reciente cambio trumpista en Estados Unidos. Y la causa de su destruccin, de su fractura, se encuentra dentro de la comunidad occidental. Es decir, se ha destruido a s mismo sin que haya sido motivado por ninguna amenaza externa.
La Comisin Europea ha insistido en que Estados Unidos sigue siendo un aliado pese a la reciente decisin de Trump de suspender temporalmente la ayuda militar - segn la Casa Blanca afecta a 1.000 millones de dlares em armas y municiones - y el intercambio de informacin de inteligencia con Ucrania, que incluye el cese de envo de datos que las agencias de espionaje estadounidense proporcionan a Kiev, principalmente, para el ataque a Rusia con drones y misiles de largo alcance.
La UE an no ha aceptado la realidad. Sigue declarando que Estados Unidos es un aliado y ya no es as. Tiene miedo a operar sin el paraguas estadounidense. Para ser exactos no hay liderazgo en Europa. Macron y Starmer no representan a la UE cuando van a visitar a Trump. Dnde se encuentran los lderes comunitarios como Ursula Van der Leyen, Antonio Costa o Kaja Kallas? La UE aun no dispone de una estrategia autnoma. El compromiso de Estados Unidos con la OTAN est en el aire.
En relacin con las garantas de seguridad a Ucrania despus de que se firme el alto el fuego, que es la principal preocupacin de Zelenski y de Europa en este momento. Cmo se van a llevar a cabo dichas garantas de seguridad ? La coalicin de voluntarios puede ser una excelente medida, pero an no se conocen los pases que la van a integrar. Se habla de que tambin formaran parte de ella Reino Unido, Canad, Noruega, Islandia y Turqua. Es decir, se actuara fuera del mbito de la Unin. Y para ello es preciso contar con la autorizacin de Rusia.
En la nueva era geopoltica de multipolaridad que se avecina, antes de que Donald Trump se hiciera cargo de la presidencia de Estados Unidos, se contemplaba al modelo geopoltico de la bipolaridad dual representado por un polo transatlntico (democrtico), compuesto por EE. UU. y la UE como centros de poder, que descansaba en el vnculo transatlntico. El otro era el polo asitico (autoritario-comunista), liderado por China y Rusia como centros de poder, que se sustentaba en la asociacin estratgica chino-rusa. En el actual tablero geopoltico este modelo ha quedado obsoleto como consecuencia de que Estados Unidos ha cambiado repentinamente el papel a desempear en el mundo.
En la actualidad, se vislumbran dos modelos de bipolaridad dual modulada en los que la UE ya no se contempla junto a Estados Unidos formando el polo transatlntico. En el primer modelo, se organizaran dos polos, uno el polo estadounidense liderado por Estados Unidos y otro el polo autoritario-comunista bajo la direccin de China y Rusia. En el segundo modelo, se contemplan tambin dos polos, un polo ruso-estadounidense, bajo el liderazgo de Estados Unidos y Rusia, y otro polo comunista capitaneado por China.
Otro posible tercer modelo geopoltico, podra ser disear un nuevo Yalta, donde apareciera una tripolaridad, representada en este momento por tres polos: Estados Unidos, China y Rusia. El primer polo, Estados Unidos tendra su esfera de influencia desde Groenlandia hasta Chile; el segundo polo, China, se extendera por el Este de Asia y el tercer polo, Rusia, abarcara el rea euroasitica. Un modelo geopoltico donde tambin Europa queda fuera como actor principal.
En definitiva, el nuevo mundo del siglo XXI se presenta como una gran metamorfosis geopoltica cambiante no slo en el campo geoestratgico sino tambin en el de las relaciones internacionales, en el tecnolgico, en el militar y en el cultural. Ya ha quedado atrs el sistema internacional liberal liderado por Occidente en las ltimas ocho dcadas en el que Estados Unidos era el actor que garantizaba la defensa europea. Queda en duda el futuro de la OTAN en la reconfiguracin geopoltica que sufrir el mundo en los prximos aos. (Jess Argumosa, Asociacin Espaola de Militares Espaoles)
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